Arias Alvarado, Roger Armando2024-03-012024-03-012018-01-010041-8242https://hdl.handle.net/20.500.14492/26540Nuestra alma máter es parte indisoluble de la nación salvadoreña, pues nació con la misma proclamación de la República, apenas con semanas de diferencia, luego que el 2 de febrero de 1841, una Asamblea Constituyente proclamara la separación del país de la Federación Centroamericana y fundara el Estado de El Salvador. A lo largo de sus 177 años de existencia, la Universidad de El Salvador ha estado presente en todas las decisiones políticas, sociales y culturales del país. No es de extrañar que sus primeros rectores también hayan sido presidentes de la República, como fue el caso de los doctores Eugenio Aguilar y Francisco Dueñas, así como cuna de prohombres y mujeres ejemplares de la política, la cultura y la ciencia como Darío González, Antonia Navarro, Santiago I. Barberena, Francisco Gavidia, Alfredo Espino, Agustín Farabundo Martí, Fabio Castillo Figueroa, Napoleón Rodríguez Ruiz, Schafik Jorge Hándal, José María Méndez, Lil Milagro Ramírez, Salvador Moncada, Roque Dalton García, Virginia Peña, Matilde Elena López, Jorge Arias Gómez, María Isabel Rodríguez o Reynaldo Galindo Pohl. De sus aulas, directo al frente de combate por la justicia, la democracia y la libertad, salieron sus mejores hijos como Farabundo Martí, Alfonso Luna, Mario Zapata, durante la insurrección indígena-campesina de 1932; pero también durante la huelga de brazos caídos contra el tirano Maximiliano Hernández Martínez, en abril y mayo de 1944; durante el combate a la tiranía del Teniente Coronel José María Lemus en 1960; y no por último, a engrosar las filas de las fuerzas insurgentes contra la dictadura militar entre 1972-1992. Durante esta sangrienta confrontación fraticida, la Universidad de El Salvador pago una alta cuota con el sacrificio de sus mejores hijos, sufrió innumerables intervenciones de la fuerza bruta y experimentó el estrangulamiento económico al cual fue sometida por la dictadura militar. Somos los herederos de una Universidad heroica y valiente al servicio del pueblo a través de la excelencia académica y el compromiso social. Es meritorio por ello recalcar el Decreto del Consejo Superior Universitario de octubre de 2017, que denomina al Campus central como “Ciudad Universitaria Doctor Fabio Castillo Figueroa”, uno de los arquetipos de compromiso social y excelencia académica.es-SVEducación superiorhistoriauniversidad de el salvador378Mensaje del señor Rector, Maestro Roger Arias Alvarado, con motivo del 177 aniversario de la fundación de la Universidad de El SalvadorArticle