Velásquez, Darthon AlexanderTorres Granillo, Edgardo JosuéCampos Corcio, Roberto EmanuelLópez De Díaz, Keylin Giselatg20002@ues.edu.svcc20066.edu.svih13006@ues.edu.sv2025-10-312025-10-312025-10https://hdl.handle.net/20.500.14492/32347El acceso al agua potable en la zona urbana de San Miguel refleja una problemática histórica que continúa siendo un reto para el bienestar de la población. Desde el uso inicial del manantial de Moncagua en 1915 hasta la perforación de pozos profundos dentro de la ciudad, la gestión del recurso ha estado marcada por el crecimiento demográfico y las limitaciones de la infraestructura. A pesar de los avances en cobertura y modernización del servicio, aún persisten desigualdades en la distribución y problemas de continuidad que afectan a miles de familias. La calidad del agua también constituye un desafío relevante. Diferentes estudios muestran la presencia de contaminantes bacterianos y químicos, lo que pone en riesgo la salud pública y evidencia la presión que enfrentan tanto los acuíferos urbanos como los ríos de la zona. Estos hallazgos subrayan la necesidad de reforzar los sistemas de monitoreo y de protección de las fuentes de abastecimiento, además de garantizar un control más estricto de la potabilidad del recurso. En respuesta, se han impulsado iniciativas recientes como la creación de laboratorios regionales para el análisis de agua y la implementación de políticas de gestión integral. No obstante, la experiencia cotidiana de los habitantes muestra que la crisis hídrica trasciende lo técnico: muchas familias deben recurrir a alternativas propias, como pozos artesanales, lo que genera nuevas vulnerabilidades. La situación de San Miguel ilustra la necesidad de avanzar hacia una gestión del agua más sostenible, equitativa y orientada al reconocimiento del agua como derecho humano fundamental. Access to drinking water in the urban area of San Miguel reflects a historical problem that continues to challenge the well-being of the population. From the initial exploitation of the Nancagua spring in 1915 to the drilling of deep wells within the city, management of this resource has been marked by population growth and infrastructure limitations. Despite advances in service coverage and modernization, inequalities in distribution and continuity problems that affect thousands of families persist. Water quality is also a significant challenge. Various studies show the presence of bacterial and chemical contaminants, which endanger public health and highlight the pressure faced by both urban aquifers and the area's rivers. These findings underscore the need to strengthen monitoring and protection systems for supply sources, in addition to ensuring stricter control of the resource's potability. In response, recent initiatives have been promoted, such as the creation of regional laboratories for water analysis and the implementation of comprehensive management policies. However, the daily experience of residents shows that the water crisis transcends the technical: many families must resort to alternative solutions, such as artisanal wells, which creates new vulnerabilities. The situation in San Miguel illustrates the urgency of moving toward more sustainable and equitable water management, oriented toward the recognition of water as a fundamental human right.esAgua potableGestión del aguaSostenibilidadAcuíferosArmonizaciónDéficit hídricoDrinking wáterWater managementSustainabilityAquifersHarmonizationWater déficitGestión y calidad del agua potable en la zona urbana de San MiguelTrabajo de grado