Salazar Ramírez, José LuisAguilar, Pedro SergioMorán Vinueza, Marlon OdirMunguía, Esmeralda Aracely2024-02-152024-02-152011-09-01https://hdl.handle.net/20.500.14492/21916En el ámbito mundial, la industria cafetalera se encuentra, en términos generales, saliendo de una crisis que afecto los precios mundiales, los cuales llegaron a su fondo histórico en la última década, al promediar los US$42,20 por quintal en su precio más bajo alcanzado en octubre de 2001 y logrando el precio más alto en mayo de 2011 con un valor de US$292.18. Con esto, muchos caficultores de más de 60 países productores tuvieron que buscar opciones para poder subsistir en una industria donde los costos de producción estaban por encima de los precios. Todo esto debido a un desequilibrio estructural entre la oferta y la demanda mundial, la primera creciendo a un ritmo promedio de 3.5% anual, y la segunda a un ritmo promedio de 1.5% anual. En El Salvador, la situación del sector no fue diferente. Los precios que recibió el productor no alcanzaron para cubrir sus costos de producción, por lo cual se vio una gran disminución de la inversión en el cultivo de café y, por consiguiente, un alto desmejoramiento de la calidad del café nacional. Dentro de los costos en los que tiene que incurrir el caficultor para producir el café, está el pago.es-SVCaficulturaexportacionescontabilidad agricola657Thesis