López Bernal, Carlos Gregorio2024-01-262024-01-262014-01-012309-687Xhttps://hdl.handle.net/20.500.14492/12106Independientemente del resultado de ese debate, si es que lo hubiera, es indiscutible que hay un consumo social de la historia, y es plausible pensar que la historia tiene una “utilidad” que puede ser desde arraigar la identidad de una sociedad — y a la inversa, desmitificar sus discursos identitarios —, apoyar la formación cívica en el sistema educativo, “justificar” cierto estado de cosas desde los poderes establecidos, hasta servir de fundamento para reivindicaciones puntuales de diferentes actores sociales. Es decir, en la historia encuentran cobijo y sostén una variedad de agendas. Desde las conservadoras hasta las revolucionarias; desde las más clásicas hasta las más postmodernas.es-SVHistoriaaspectos socialesel salvador82972.84Historia y memoria: los usos políticos del pasadoArticle