La convivencia social de todo conglomerado crea problemas
de relación que , para solucionarlos, exigen la intervención
de un ente superior más fuerte que cualquier individuo o grupo de individuos. Ese ente ha sido, a través de las distintas épocas: la horda, la familia primitiva, el clan, la tribu, la confederación de tribus, la ciudad, y, finalmente, EL ESTADO.